Los celos infantiles son la manifestación de emociones y sentimientos hacia la persona de apego que no saben expresar de otro modo. Generalmente aparecen con la llegada de un nuevo hermano, pero también por la atención a otro niño, sea un primo o un amigo. O incluso a otros adultos. Es inecesario saber cómo tratar los celos en los niños para evitar ese sentimiento que le daña. Y que puede perjudicar sus relaciones futuras si no se gestiona adecuadamente.
Cómo tratar los celos infantiles
Ante la conducta del niño celoso, ignorar esta
La manifestación de celos infantiles debe pararse al momento cuando conlleva una agresión por parte del niño celoso. Cuando esta manifestación tiene otra forma como rabietas es importante comunicarle con tranquilidad y de forma clara la decepción con su comportamiento. Es aconsejable retirar la atención tras ello para evitar fomentar precisamente la conducta que deseas atajar.
Tras el episodio de celos infantiles se debe razonar con el niño
Una vez pasado el episodio de celos se debe hablar con el niño y expresar que querer a otro no implica no quererle a él. Según la edad y emociones del niño es más fácil o complicado tratar de razonar sobre una cuestión que afecta a un sentimiento tan íntimo. Pero es importante tratar de hacerlo, incluso aunque se muestre poco receptivo.
Consejos para superar los celos infantiles
Aunque la prevención es el primer paso para evitar los celos infantiles no siempre es suficiente. Por ello, estos consejos te ayudarán a tratar con el niño celoso para que supere esos sentimientos, refuerce la relación con la persona de apego emocional y desarrolle una buena relación con otros niños y adultos.
El refuerzo positivo siempre es una conducta adecuada a seguir
También en el caso del niño celoso. Es importante que sepa que se aprecian sus cualidades. Y que reciba elogios cuando actúa bien y mantiene una relación natural y adecuada con otras personas. Especialmente con aquellas con las que se muestra más celoso.

Una vez se haya pasado el episodio de celos se debe hablar con el niño y tratar de razonar
Evitar comparaciones y la rivalidad entre ellos
Especialmente entre niños, ya sean hermanos, primos o amigos. Cuando uno sale mejor parado que otro, en este último puede surgir un complejo de inferioridad que desate sus celos. Se pueden alabar las cualidades diferentes de ambos, pero nunca compararlos y que uno salga peor parado.
Además, es indispensable evitar a toda costa generar conductas de rivalidad que pueden desatar los celos infantiles. Los juegos, por ejemplo, no deben basarse en el triunfo de uno a costa del otro, sino en la diversión o colaboración conjunta.
Fomentar las actividades conjuntas y las buenas experiencias compartidas
Una buena forma de ayudar al niño a superar los celos infantiles es fomentar actividades con la persona hacia la que siente celos. Sea su hermano, otro niño o un adulto como la nueva pareja de un progenitor, por ejemplo. También la persona de apego participará con ello.
Es recomendable que esta actividad refuerce los lazos y la colaboración entre ambos. Y que el niño perciba que el adulto de apego sigue estando ahí, presente y como una figura de seguridad para él. Y que sea una experiencia positiva que le deje buenas sensaciones y ganas de repetir. Ver que no cambia la actitud de la persona de apego hacia él y que puede divertirse o sentirse feliz con su, llamémosle rival, le ayudará a dejar de ser un niño celoso.
Ten en cuenta estos consejos para actuar ante los celos infantiles. Y así, ayudar al niño a superar esas emociones perjudiciales para él mismo y para la familia. Es tan importante para su bienestar actual como para sus relaciones futuras. Si buscas a algún profesional educativo, en nuestra Escuela Infantil Solecitos te ayudaremos a solventar todos tus problemas e inquietudes.